
El HIFU facial (Ultrasonido Focalizado de Alta Intensidad, por sus siglas en inglés) es un tratamiento estético no invasivo que utiliza ondas de ultrasonido para reafirmar, tensar y rejuvenecer la piel del rostro, estimulando la producción de colágeno y elastina en las capas más profundas de la piel. Es una alternativa eficaz a procedimientos quirúrgicos como el lifting facial, proporcionando resultados naturales y progresivos sin necesidad de tiempo de recuperación.
¿Cómo funciona el tratamiento HIFU facial?
El HIFU actúa mediante la emisión de ondas de ultrasonido focalizadas en capas específicas de la piel, generando calor controlado que:
- Estimula la producción de colágeno: Alcanza las capas profundas de la piel, favoreciendo la regeneración natural del tejido.
- Tensa la piel: Gracias a la contracción de las fibras de colágeno existentes.
- Define el contorno facial: Actúa en la grasa subcutánea, reduciendo la flacidez en áreas como la papada y el óvalo facial.
El tratamiento llega a capas como:
- Epidermis y dermis: Mejora la textura y firmeza de la piel.
- Capa muscular superficial (SMAS): La misma capa que se trabaja en un lifting quirúrgico.
- Tejido graso subcutáneo: Ayuda a reducir el exceso de grasa y mejorar la apariencia del rostro.
Beneficios del HIFU Facial
- Reafirma la piel y redefine el contorno facial.
- Reduce arrugas y líneas de expresión.
- Estimula la producción de colágeno y elastina.
- Disminuye la flacidez en áreas como el cuello y la papada.
- Efecto lifting sin cirugía ni inyecciones.
- Resultados progresivos y naturales en 2-3 meses.
- No requiere tiempo de recuperación.
¿Para qué zonas se recomienda HIFU facial?
El tratamiento se puede aplicar en varias zonas del rostro, incluyendo:
- Frente.
- Pómulos y mejillas (para reafirmar y reducir flacidez).
- Contorno facial y papada.
- Cuello y escote.
- Zona periocular (para suavizar arrugas alrededor de los ojos).
Procedimiento del HIFU facial
El tratamiento suele durar entre 30 y 90 minutos, dependiendo de la zona tratada. Los pasos generales son los siguientes:
- Evaluación inicial: Se analiza el estado de la piel y se establecen objetivos personalizados.
- Limpieza de la piel: Eliminación de impurezas para una mejor penetración del ultrasonido.
- Aplicación de gel conductor: Facilita la transmisión de las ondas de ultrasonido.
- Emisión de ultrasonido focalizado: Se realizan disparos en las áreas a tratar.
- Finalización con cremas calmantes y protección solar.
Resultados esperados y duración del efecto
Los resultados no son inmediatos, ya que el colágeno necesita tiempo para regenerarse. Se comienzan a notar mejoras a partir de la tercera semana, con un efecto máximo a los 2-3 meses. La duración de los efectos varía según el estilo de vida y el envejecimiento natural de cada persona, pero suelen mantenerse entre 12 y 18 meses.
Se recomienda realizar una sesión anual para mantener los resultados óptimos.
¿Quiénes son candidatos ideales para HIFU facial?
Este tratamiento es ideal para personas que:
- Presentan signos de envejecimiento leve a moderado.
- Desean una alternativa no quirúrgica al lifting facial.
- Buscan mejorar la flacidez de la piel sin tiempo de recuperación.
- Tienen una piel con pérdida de firmeza en mejillas, cuello y mandíbula.
Sin embargo, no es recomendable para personas con:
- Flacidez extrema que requiera cirugía.
- Heridas abiertas o infecciones en la zona a tratar.
- Implantes faciales o marcapasos.
- Trastornos autoinmunes que afecten la cicatrización.
Efectos secundarios
El HIFU facial es seguro, pero pueden presentarse efectos leves como:
- Enrojecimiento temporal.
- Hormigueo o leve hinchazón en la zona tratada.
- Sensibilidad durante algunos días.
Cuidados post-tratamiento
- Evitar la exposición solar directa y utilizar protector solar de alto espectro.
- No aplicar productos agresivos (ácidos o exfoliantes) en los primeros días.
- Mantener una hidratación adecuada para potenciar los resultados.
- No realizar tratamientos invasivos en la zona durante al menos 2 semanas.